25 de marzo de 2009

Insomnio



No es una novedad, pero hoy tampoco puedo dormir.

En mi cabeza suena, una y otra vez, aquella canción que hablaba de contemplar las luces de un semáforo. De observar cómo se pone rojo, amarillo, verde, y otra vez rojo; y saber que lo único que tienes que hacer es pisar el acelerador cuando las reglas que definen esas luces te lo permitan. Y ser, aún así, incapaz de hacerlo. Quedarse congelado. Esperando, en el fondo, que el acelerador se accione solo. Y fallando en el intento.

It's not - Aimee Mann

2 comentarios:

  1. con leche y un croissant (sin cubiertos...)30 de marzo de 2009, 4:21

    todo es relativo Lu...

    ese acelador que esperas se accione sólo, te aseguro que siempre está acelerando, siempre, y sabes cuando te das cuenta de ello??? cuando adelantas el semáforo y miras atrás... entonces te das cuenta de la velocidad que te da esa aceleración...

    un saludo desde el otro lado del charco !!

    no sé cómo he llegado a tomarme este café americano; pero intentaré volver por la cafetería...

    ResponderEliminar
  2. No stop signs, speed limit
    Nobody's gonna slow me down
    Like a wheel, gonna spin it
    Nobody's gonna mess me round
    Hey Satan, paid my dues
    Playing in a rocking band
    Hey Momma, look at me
    I'm on my way to the promised land!

    Menos elegante, más contundente.

    ResponderEliminar