Mi lado escéptico no quiere escribirlo, pero tenías razón: la vida es cíclica.
El camino deja de ser incierto, y me devuelve al punto de partida.
Y me sorprende comprobar que, como cuando estudiaba los exámenes la víspera, parezco haber olvidado todo lo que aprendí. No quedan certezas, o señales que apunten hacia el atajo por el que escapé del laberinto. Las preguntas insisten, inagotables; y mi único deber es el de impedir que se formulen, que se transformen en palabras y salten al vacío. Porque, como casi siempre, la curiosidad juega en mi contra.
Y, esta vez, ninguno de los silencios me ayudará a aceptar que las cinco efes se han quedado en una.
No distance left to run - Blur
(La intimidad de tus palabras va en aumento. Si prefieres convertir tus líneas en algo de ámbito privado, sólo dilo, sin rodeos; la privacidad, incluso en esta red extraña, es perfectamente exigible. Tendrás que fiarte de la palabra de un anónimo de que no volverá a leer cosas que no se dirigen a él, pero él lo hará.)
ResponderEliminarLeyéndote, me he acordado de George Santayana, el filósofo y profesor de Oxford. Que realmente era Jorge Agustín Nicolás, y nacido en Madrid. Y que es el que dijo eso que tanto se cita de "the one who does not remember history is bound to live through it again", sin saber quién lo escribió, o que figura en la entrada de Auschwitz-Birkenau.
Cambia history por story y aplícate el cuento, señorita.
No quiero ponerme profundo, dándote consejos desde la inexperiencia y el desconocimiento de tu situación actual, porque considero que no tengo respuestas para casi nada y las preguntas insisten sobre mi conciencia con la misma frecuencia que en tu caso.
ResponderEliminarPor eso sólo me veo capacitado para decirte que prefiero tus textos descriptivos, que evocan imágenes con muchísima elegancia. Pese a que muestres tus sentimientos, etcétera, etcétera, creo que los últimos dos textos tienen poca chicha 'literaria'. Si es que pretendes, claro, escribir literatura.
Un beso, pequeña.